Sagradas Escrituras (Biblia del Oso) - 15692 Toma a Aarón y a sus hijos con él, y las vestimentas, y el aceite de la unción, y el novillo de la expiación, y los dos carneros, y el canastillo de los ázimos; 4 Hizo, pues, Moisés como el SEÑOR le mandó, y se reunió la congregación a la puerta del tabernáculo del testimonio. 7 Y puso sobre él la túnica, y le ciñó con el cinto; le vistió después el manto, y puso sobre él el efod, y lo ciñó con el cinto del efod, y lo ajustó con él. 9 Después puso la mitra sobre su cabeza; y sobre la mitra delante de su rostro puso la plancha de oro, la corona de la santidad; como El SEÑOR había mandado a Moisés. 10 Y tomó Moisés el aceite de la unción, y ungió el tabernáculo, y todas las cosas que estaban en él, y las santificó. 11 Y roció de él sobre el altar siete veces, y ungió el altar y todos sus vasos, y la fuente y su basa, para santificarlos. 13 Después Moisés hizo llegar los hijos de Aarón, y les vistió las túnicas, y los ciñó con cintos, y les ajustó los chapeos (tiaras), como el SEÑOR lo había mandado a Moisés. 14 ¶ Hizo luego llegar el novillo de la expiación, y Aarón y sus hijos pusieron sus manos sobre la cabeza del novillo de la expiación, 15 y lo degolló; y Moisés tomó la sangre, y puso con su dedo sobre los cuernos del altar alrededor, y expió el altar; y echó la demás sangre al cimiento del altar, y lo santificó para reconciliar sobre él. 16 Después tomó todo el sebo que estaba sobre los intestinos, y el redaño del hígado, y los dos riñones, y el sebo de ellos, e hizo Moisés perfume sobre el altar. 17 Mas el novillo, y su cuero, y su carne, y su estiércol, lo quemó con fuego fuera del real; como el SEÑOR lo había mandado a Moisés. 18 Después hizo llegar el carnero del holocausto, y Aarón y sus hijos pusieron sus manos sobre la cabeza del carnero; 21 Lavó luego con agua los intestinos y las piernas, y quemó Moisés todo el carnero sobre el altar; holocausto en olor muy aceptable, ofrenda encendida al SEÑOR; como el SEÑOR lo había mandado a Moisés. 22 Después hizo llegar el otro carnero, el carnero de las consagraciones, y Aarón y sus hijos pusieron sus manos sobre la cabeza del carnero; 23 y lo degolló; y tomó Moisés de su sangre, y puso sobre la ternilla de la oreja derecha de Aarón, y sobre el dedo pulgar de su mano derecha, y sobre el dedo pulgar de su pie derecho. 24 Hizo llegar luego los hijos de Aarón, y puso Moisés de la sangre sobre la ternilla de sus orejas derechas, y sobre los pulgares de sus manos derechas, y sobre los pulgares de sus pies derechos; y roció Moisés la sangre sobre el altar en derredor; 25 y después tomó el sebo, y la cola, y todo el sebo que estaba sobre los intestinos, y el redaño del hígado, y los dos riñones, y el sebo de ellos, y la espaldilla derecha; 26 y del canastillo de los ázimos, que estaba delante del SEÑOR, tomó una torta sin levadura, y una torta de pan de aceite, y una lasaña, y lo puso con el sebo y con la espaldilla derecha; 27 y lo puso todo en las manos de Aarón, y en las manos de sus hijos, y lo hizo mecer en ofrenda de mecedura delante del SEÑOR. 28 Después tomó aquellas cosas Moisés de las manos de ellos, e hizo perfume en el altar sobre el holocausto; son las consagraciones en olor muy aceptable, ofrenda encendida al SEÑOR. 29 Y tomó Moisés el pecho, y lo meció, en ofrenda de mecedura delante del SEÑOR; del carnero de las consagraciones aquella fue la parte de Moisés; como el SEÑOR lo había mandado a Moisés. 30 Luego tomó Moisés del aceite de la unción, y de la sangre que estaba sobre el altar, y roció sobre Aarón, y sobre sus vestiduras, y sobre sus hijos, y sobre las vestiduras de sus hijos con él; y santificó a Aarón, y sus vestiduras, y a sus hijos, y las vestiduras de sus hijos con él. 31 ¶ Y dijo Moisés a Aarón y a sus hijos: Comed la carne a la puerta del tabernáculo del testimonio; y comedla allí con el pan que está en el canastillo de las consagraciones, según yo he mandado, diciendo: Aarón y sus hijos la comerán. 33 De la puerta del tabernáculo del testimonio no saldréis en siete días, hasta el día que se cumplieren los días de vuestras consagraciones; porque por siete días seréis consagrados. 35 A la puerta, pues, del tabernáculo del testimonio estaréis día y noche por siete días, y guardaréis la ordenanza delante del SEÑOR, para que no muráis; porque así me ha sido mandado. |